Nuevo Régimen Tributario y sus atractivos para las industrias, o cómo estamos tratando que los agro exportadores opten por la industrialización.

En nuestro país solíamos tener un caso muy particular en materia tributaria, existía una facilidad que otorgaba el Estado a las agro exportadoras.

Esta facilidad consistía en la devolución del IVA Crédito Fiscal para las exportaciones, lo que significaba que el IVA que se pagaba al adquirir bienes y servicios podría ser recuperado en su totalidad, ya sea como compensación contra el IVA Débito Fiscal (o IVA a Pagar) o en caso de existir excedentes, retirarlo en efectivo.

Lo que no le gustaba para nada a la SET era que esta facilidad estaba generando una pérdida fiscal enorme para el Estado, en el último ejercicio del 2019 las grandes agro exportadoras pagaron USD 18 millones en concepto de IVA, sin embargo recibieron una devolución equivalente a los USD 68 millones.

Tapando un agujero de USD 50 millones.

El 19 de Junio de 2019 la Cámara de Senadores aprobó la eliminación de esta devolución del IVA a agro exportadores que exporten sus bienes en estado natural y los derivados del primer proceso de elaboración tales como harinas y aceites.

Esto generó un gran descontento y el gremio del sector agropecuario amenazó con recurrir a la Corte Suprema para revertir esta Ley y así seguir recibiendo este beneficio, el congreso por otro lado, no se vio intimidado y siguió firme con el proyecto de Ley propuesto Hacienda para la reforma tributaria, de la cual hacía parte esta nueva política tributaria, pues esta medida es fundamental para uno de los ejes que procura la nueva legislación tributaria que es incrementar la inversión en industrialización en el país.

Cómo incentivar la Industrialización

La respuesta a esta suele ser la misma en varios países: Incentivos fiscales. Y es exactamente eso lo que aplicó Hacienda.

Esto lo hace en 2 impuestos, uno ya larga data en nuestra economía, el IVA, y otro que es la adaptación de uno ya existente, el IDU (Impuesto a Dividendos y Utilidades),

El más interesante es el IDU pues es el que afecta directamente a la renta que puedan obtener los propietarios de las empresas, sean estos socios, accionistas, comanditarios. El IDU observa un tributo del 8% a residentes en el país y esta tasa se eleva al 15% cuando se trata de No Residentes.

En el Artículo 133 de la Ley 6380/19 de Modernización y Simplificación del Sistema Tributario establece que los propietarios de empresas que incorporen valor agregado a la materia prima agrícola se beneficiaran con un descuento del 20% en el IDU cuando la empresa haya realizado una inversión de USD 5.000.000 o lo que sería su equivalente en guaraníes, unos 3.200.000.000.

Los dueños de las empresas podrán beneficiarse de una reducción de la carga tributaria que recae directamente sobre ellos, y no sobre la empresa.

El otro incentivo es el referente al tópico ya mencionado con anterioridad, la devolución del IVA a las exportaciones del sector agropecuario.

La misma Ley ya mencionada en su Artículo 101 establece que las exportaciones de productos agrícolas en estado natural o los derivados del primer proceso de industrialización no podrán acceder a la devolución del IVA. Escapan de esta exclusión los productos agropecuarios procesados e industrializados derivados de procesos siguientes.

Opinión personal respecto a lo que el Estado busca con estas políticas

Uno que otro inversor se dará cuenta de estos beneficios y de como a la larga esa inversión en industrias más avanzadas en nuestro país le podrá rendir a largo plazo teniendo en cuenta estos beneficios fiscales.

Los productos no procesados como la soja, maíz y trigo son commodities, por lo que su precio se establece a la oferta y la demanda global. Al producir bienes de consumo derivados de la industrialización de materia prima que tenemos en abundancia como la soja, maíz y trigo, nuestras industrias se posicionarán en un lugar más cómodo a la hora de establecer los precios de sus productos y no sufrirán de las constantes variaciones del mercado global cuando de commodities se trata.

La industrialización de estos productos en nuestro país ronda el 45%, lo que significa que no estamos sacándole el máximo provecho a estos productos con el valor agregado que significa industrializarlos. Esto generaría una gran demanda de mano de obra para mover estas industrias lo que reduciría nuestra tasa de desempleo, moviendo la economía a nivel país y en el mejor de los casos, aumentando la recaudación y la formalización del empleo.

Esto permitirá que nuestro país pueda producir gran parte de lo que consumimos aquí y que de esta manera ya no se deba recurrir al mercado externo para acudir a productos de 1ra necesidad, por otro lado, nos encontraríamos entre los países que producen gran cantidad de producto terminado y en vez de que nuestros productos coticen por lo que dictan los indices de commodities podríamos establecer nuestros precios de acuerdo a nuestros costos y ganancias esperadas.

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